Participo con vosotros de las siguientes reflexiones:

 ¿La elevada recurrencia de acciones formativas conlleva el desinterés o desmotivación del trabajador?

¿Se realiza una correcta valoración de la eficacia sobre las acciones formativas impartidas? 

En muchas ocasiones, independientemente de la pericia o habilidad del TSPRL, he podido comprobar que los trabajadores con el tiempo tienden a desconectar sin percibir la importancia que supone la no asimilación de los contenidos impartidos.

La pregunta es: ¿nos quedamos ahí? es decir si intuimos que estos supuestos pueden suceder tendremos que actuar en consecuencia y plantear cambios estructurales dirigidos a modificar la metodología de la impartición, la participación de los trabajadores y establecer indicadores de seguimiento que garanticen la eficacia de la acción formativa.

En este sentido comparto con vosotros 3 medidas básicas. Os aseguro que se consiguen unos resultados más que satisfactorios:

1.      Una parte del contenido de la jornada formativa la debe impartir siempre un Mando de quien dependan los trabajadores que la están recibiendo. Suele ser muy útil las aportaciones prácticas, las experiencias vividas, así como la exposición de situaciones de riesgo que puedan presentarse.

 2.      Establecer la obligatoriedad de participación de todos los asistentes. Esto supone, no solo hacer preguntas individuales a los trabajadores durante la jornada para mantener su atención, sino más bien establecer dinámicas grupales en las que primero se realice sobre todos ellos un ejercicio de reflexión particular y luego se debata sobre los contenidos manifestados.

 3.      Establecer su seguimiento a través del Comité de Seguridad y Salud. Como un punto más del orden del día, tendrá como objetivo la valoración de la eficacia de todas las acciones formativas que se hayan impartido desde la última sesión ordinaria. Aquí será necesario evidenciar cómo, cuando, quién y de qué manera se ha llevado a cabo.

Con la aplicación de estas medidas se obtienen, entre otras, las siguientes mejoras:

• El trabajador se involucra y se motiva exponencialmente para el aprendizaje.
• El mando, participando en la impartición, se conciencia y se ratifica en la importancia de trabajar siempre desde la Prevención y la Seguridad.
• El TSPRL ve reforzada su actuación y transmisión de contenidos.
• La Organización, es la que obtiene más beneficios: implica preventivamente a todos los niveles jerárquicos de la estructura, se enriquece con las aportaciones de los trabajadores, aumenta el nivel de concienciación/sensibilización y supervisa los resultados obtenidos comprobando si se ha realizado una correcta valoración de la eficacia sobre la acción formativa.

Espero que pueda serviros de ayuda en vuestras Organizaciones.